Si hay algo que nadie discute es la necesidad de alimentar a una población cada vez más numerosa y más longeva, y de una manera sostenible. El sector primario resulta esencial, y para cumplir los objetivos de sostenibilidad y suficiencia se hace indispensable innovar y modificar el proceso productivo para ser cada vez más eficientes.
Actualmente la maquinaria agrícola no solo trabaja el campo, sino que es capaz de cosechar datos, con estos datos se generan mapas que mejoran los procesos y aumentan los rendimientos y la rentabilidad; si bien, con el uso de estas nuevas herramientas aparecen también nuevas problemáticas, que hacen que los abogados tengamos que quitarnos las corbatas y ponernos las botas de campo para ayudar a nuestros agricultores y ganaderos a tener unas explotaciones mucho más eficientes y también ágiles y seguras.
Son múltiples las apps que hay hoy en el mercado para documentar las tareas agrícolas, que funcionan mediante la recolección de datos agrícolas que se recogen en la propia explotación, y que han pasado a ser la verdadera fuente de la que se proveen los empresarios del sector agroalimentario. La mejora de la productividad agrícola no puede producirse sin la tecnología.
Esta recogida, análisis e interpretación y uso de los datos viene, como decimos, de la mano de la tecnología, con dos objetivos claros, aumentar la producción y reducir los costes.
Las tendencias se dirigen a la agricultura de precisión (sensores, drones, trazabilidad), la agrobiotecnología (prácticas agrícolas sostenibles, mejoras en la salud y la calidad del suelo), el food e-commerce, y la robótica 3D (visión artificial).
Cuando hablamos de agricultura de precisión hablamos de un método de gestión de una finca sobre la base de las tecnologías de la información, mediante la recogida de datos agrarios. Estos datos terminan constituyendo verdaderos activos en empresas de estas características que le ley protege a través de la Ley de Secretos Empresariales. A estas informaciones no se les aplica el Reglamento general de Protección de Datos por no tratarse de datos de carácter personal. En este sentido queda igualmente un largo camino por recorrer, la agricultura de precisión es ya una realidad en las explotaciones agroalimentarias españolas, y los empresarios, en la mayoría de los casos no saben como acceder a esa tecnología, como tratar los datos, o como valorarlos en el caso de venta de la empresa.
La inversión en el sector agrotech se ha triplicado entre el 2004 y el 2016, y continúa creciendo, y no nos extraña.
Si eres de los que ya trabaja con tecnología en el campo y necesitas que te ayudemos a ponerlo todo en regla puedes ponerte en contacto con nosotros en clientes@lecoverabogados.com , utilizando nuestro teléfono de contacto 608502382 o por medio de nuestro formulario de contacto pinchando aquí www.lecoverabogados.com